La Paz/AMN.- La Defensoría de la Niñez y Adolescencia de la Alcaldía de La Paz concilió con los progenitores del niño Wilder un acta de prevención porque sufría violencia verbal del padrastro, informó hoy la secretaria de Desarrollo Social, Rosmery Acarapi. Descartó la posibilidad de llevar al niño a un albergue, se quedará junto a su madre.
“Al pequeño su padrastro le decía que es flojo, que debe trabajar para ayudar a la mamá y burro porque le costaba comprender las matemáticas; por eso vimos pertinente de convocar a ambos progenitores (para decirles) que esa no es la mejor (forma) de tratar porque el menor expresó llanto y tristeza. Pero por el momento no hay ningún riesgo de que pierdan al menor, el acta que firmaron es de prevención”, aseguró la servidora pública.
Explicó que en el documento que los progenitores firmaron -que fue leído por un abogado porque la madre no sabe leer, pero sí su pareja- los dos se comprometen a cuidar, proteger y hacer conocer de manera oportuna cualquier situación de riesgo de vulneración de derechos, además de seguir con el apoyo psicológico edil. Dijo que también dispusieron la ayuda de la Escuela de Padres porque algunas veces el niño “muestra reacciones negativas”.
“En el pie del documento especifica que la madre no sabía leer, por eso el abogado leyó ‘inextenso’ el acta”, reiteró Acarapi. Asimismo, recordó que luego de que un periodista comunicó a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia que el niño estaba días sin comer el 15 de septiembre, en la misma jornada el personal edil les entregó un primer paquete de alimentos.
Asimismo, dispusieron que el personal médico del Centro de Salud de Tacagua revise a la madre del menor porque tiene quistes en sus ovarios. En esa línea, Acarapi insistió en que se hará seguimiento a la familia para que puedan “estar bien” y que el brazo social edil continuará con la asistencia social y psicológica.
En un breve contacto con los periodistas reiteró que no hay la posibilidad de trasladar al niño a un albergue porque se comprende que él ayuda a su madre al trabajar en cercanías de la plaza Murillo.
