La Paz/AMN.- Despierta la Pachamama (Madre Tierra). La directora de Mercados de la Alcaldía de La Paz, Paola Valdenassi, informó en esta jornada que 10 vendedoras del mercado Uruguay ponen a la venta las tradicionales mesas de ofrenda para agosto.
“En La Paz tenemos la costumbre de poner las k’oas, es una característica y tradición antiquísima”, destacó la funcionaria edil. Explicó que las comerciantes, el resto del año ofrecen una variedad de productos pero este mes se dedican exclusivamente a expender las mesas para la ch`alla.
Este centro de abasto está ubicado en una de las zonas más populosas de la urbe paceña: en el macrodistrito Max Paredes.
Valdenassi señaló que este espacio está abierto desde las 07.00 hasta las 20.00.
Los precios de las mesas van desde Bs 10, 50 y 80, e incluso, algunas cuestan hasta Bs 200, que son las “especiales”. “El costo es variado, los clientes pueden elegir si es para el hogar o el trabajo y bajo esas condiciones hacen la compra”, señaló la funcionaria.
¿Cómo las preparan?… Llevan “misterios”, que son dulces de azúcar con alegorías de los deseos, como los signos de dólar si buscan dinero; un avión para viajar; la figura de una casa, un auto y hasta un corazón para el amo. Mientras que las mesas especiales tienen sullus (fetos de llama), que se ponen al centro y las vendedoras las envuelven en oro y plata para atraer la suerte.
Valdenassi sostuvo que se busca posicionar este centro de abasto como un ícono de las mesas de ofrenda a la Pachamama. “El mercado Uruguay es un referente para poner a la venta este tipo de productos”, afirmó.
La Municipalidad también inició el mes de la Pachamama con una ofrenda el primer día de agosto para pedirle salud, prosperidad y agradecimiento por los logros obtenidos.
En el municipio de La Paz hay 30 sitios sagrados donde se hacen ofrendas, entre apachetas, wak’as, achachilas y mama qutas. Las apachetas que recibirán a los visitantes son la de Llaullini, en Zongo; la de Ciudad Satélite, en el límite entre Cotahuma y El Alto; y algunas wak’as son la de Awki Qullu Wak’a, en la Muela del Diablo; y la wak’a Valle de la Luna, en Mallasa.
