La Paz/AMN.- La Defensoría de la Niñez y Adolescencia atendió 147 casos de menores de edad que fueron sorprendidos consumiendo bebidas alcohólicas en vía pública, entre enero y julio de este 2019. De ellos, 80 son mujeres y 67 varones.
Del total de adolescentes encontrados, 131 son casos nuevos y 16 son reincidentes. Estos casos con atendidos por la Policía Boliviana y en otros casos por la Guardia Municipal, que los derivan a la defensoría.
“Se los encuentra en vía pública, por ejemplo en el Bosquecillo de Pura Pura, en las plazas. Muy pocas veces se los encuentra en lugares concurridos y céntricos, generalmente se van a consumir bebidas a las laderas”, informó la directora de la Niñez y Adolescencia, Jacqueline Llanos.
Concurren a estos lugares entre las 20.00 hasta las 23.00. En otros casos, los adolescentes fueron sorprendidos en la madrugada.
Abordaje
Una vez que los menores son remitidos a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, se espera que les pase el estado de ebriedad. En otros casos se los llevó a un hospital, ya que en alguna oportunidad se presentó casos de intoxicación alta y tuvieron que ser internados. Luego, el personal municipal recaba datos de los padres para comunicarse con ellos.
“Una vez que logramos conversar con ellos y tener la información adecuada. Nos comunicamos con sus progenitores. Muchas veces cuando están en estado de ebriedad niegan la existencia de padres, evitan darnos información o no dan información verdadera”, manifestó.
Tratamiento
Estos casos son derivados al área de psicología de la Defensoría y en otros casos son derivados al Centro Terapéutico, sobre todo cuando la familia en su conjunto requiere terapia.
A pesar que el tratamiento en ambas áreas es gratuito, muchos padres de familia no acompañan a sus hijos, ni se comprometen con la solución del problema. Creen que este consumo es parte del crecimiento y no visualizan que más adelante podría provocar problemas.
“Una vez un papá ha manifestado: por qué lo estamos reprendiendo así a su hijo, si ha consumido solo un poco de alcohol. No comprende que un menor no puede consumir bebidas alcohólicas, incluso genera molestia que el caso sea registrado en la defensoría”, lamentó Llanos.