La Paz/AMN.- Vecinos que lucharon por hacer prevalecer sus derechos en el barrio de Miraflores, realizan trabajos comunales de limpieza y pintado de los postes ornamentales en la plaza Uyuni. Así lo informó esta mañana el representante de los voluntarios, Sergio Guillen.
“Desde el 25 de octubre hemos tenido un lindo contacto con los vecinos los días que ha empezado el paro cívico y nos hemos unido ahora en una acción vecinal con las señoras, señores y jóvenes valerosos que han estado a mi lado porque la patria así lo necesitaba”, dijo Guillen quien junto a un grupo de vecinos realizaron estas labores en la plaza Uyuni.
Guillen recuerda que el primer día que salieron a bloquear en la plaza eran alrededor de 50 personas que protestaron por el fraude electoral y el desconocimiento del voto en las elecciones del pasado 20 de octubre
Los vecinos relatan que en los días de conflicto utilizaron los postes para pegar banderas nacionales, pancartas de protesta y cuerdas para bloquear el acceso a la plaza Uyuni. Para este fin utilizaron adhesivos que provocaron el desgaste de la pintura de los postes una vez que sacaron todo este material.
“Eso por eso que hoy nos encontramos aquí y estamos pintando otra vez porque lo hemos utilizado y nos han servido (los postes) para demostrar a todo el mundo nuestra lucha por la libertad y la democracia del país”, indicó el encargado vecinal.
Junto con Guillen, 15 vecinos y vecinas realizan hoy esta acción comunal voluntaria en beneficio del barrio miraflorino.
El vecino fue enfático al señalar que ninguna de las personas que participaron de la manifestación pacífica recibió dinero para hacerlo sino que lo hicieron de buena fe por sus convicciones de “libertad y democracia”.
“También hemos limpiado las fogatas que nos han servido para las noches de vigilia y zozobra que vivimos aquí en la zona que prácticamente nos han dejado atemorizados y sin dormir durante varias noches. (…) Doy gracias a Dios de habernos unido a los vecinos porque ahí hemos visto que sí estamos unidos y nos ha ayudado a conocernos más como una familia porque compartíamos alimentos y refrescos. Las señoras de las tiendas nos traían café… en fin, hemos tenido una solidaridad de parte de ellos que nos miraban todo el día protestando en las calles”, expresó Guillen emocionado.
