El alcalde Iván Arias, en intervención en Bolognia el jueves 1 de julio.

AMUN/17-12-21
La Alcaldía de La Paz consolidó entre mayo y diciembre la propiedad municipal de 265 predios que estaban en riesgo de loteadores; 34 fueron recuperados de asentamientos ilegales y en este periodo se emitieron 277 notificaciones con participación de las subalcaldías.

El alcalde Iván Arias informó los datos de territorio recuperado en una conferencia de prensa que dio sobre su gestión de ocho meses. Invitó a los periodistas a realizar la Ruta de los Loteadores, ya que los asentamientos ilegales están en todos los macrodistritos.

“(Los loteadores) son un cáncer, nos destruyen la ciudad, no la aman, están tumbando los cerros, están tumbando árboles; no les importa la vida, lo que les importa es lucrar. Tienen una estructura mafiosa que empieza con grupos de choque”, afirmó la autoridad municipal.

Arias lideró desde mayo varias inspecciones y operativos de recuperación de territorio y, durante sus visitas, evidenció el modo operativo de los loteadores que al cometer ilícitos también actúan con otros abusos.

“Tienen grupos de vecinos que vende (lotes), les dicen ‘te doy un lote, dos lotes gratis’, estos se vuelven grupos de choque, de represión, amenazan a los vecinos que denuncian. Luego tienen abogados que defienden. Luego tienen autoridades en el poder judicial que meten juicio”, sostuvo el alcalde de La Paz y develó casos de vecinos que responden a procesos penales activados por loteadores, solo porque denunciaron apropiación indebida del espacio público.

“Al año es mi promesa que vamos a seguir consolidando la autoridad y propiedad municipal, sabemos que es peligroso, nuestros subalcaldes, subalcaldesas, debo agradecer”, dijo Arias. Para 2022, la Alcaldía proyecta conformar el grupo de vecinos “Chukutas en defensa de La Paz” que coadyuvarán en la lucha contra avasalladores.

Durante el informe de gestión, el alcalde de La Paz recordó que el 20 de mayo desarticularon a clanes de loteadores que talaron árboles, construyeron viviendas precarias y los funcionarios municipales y policiales fueron amedrentados.

Las lluvias también evidenciaron las acciones ilegales de los loteadores que removieron terreno y cortaron suelo; y cuando llueve, este material cae como mazamorra, como sucedió en el rio Tangani Chico, Taypichuro, Rosasani y Aruntaya.
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