Un bus PumaKatari en la parada de la plaza Camacho. Foto: AMUN.

AMN/21-09-21

El alcalde Iván Arias informó este martes que “hay PumaKatari para rato”, a pesar de la difícil situación económica por la que atraviesa La Paz Bus, y para garantizar el servicio de transporte de pasajeros, dijo, se disminuyó el subsidio del servicio del 95% al 83%.

“Estamos haciendo ajustes muy serios, hemos logrado bajar la presión del subsidio del 95% al 83%, estamos mejorando, va a ver PumaKatari para rato, pero por supuesto el informe que ayer (lunes) hemos presentado es un informe preocupante”, dijo el alcalde después de su declaración informativa en calidad de sindicado en la Fiscalía de La Paz, por el caso de una presunta discriminación al excandidato por el Movimiento Al Socialismo, César Dockweiller.

El lunes, el secretario Ejecutivo de la Alcaldía, Julio Linares, presentó un informe financiero del estado de situación del servicio de La Paz Bus, que tiene un déficit de 80 millones de bolivianos anuales y, según el informe, en casi ocho años de operación los gastos de funcionamiento ascienden a 637 millones de bolivianos, mientras que los ingresos por recaudación llegan a 121 millones de bolivianos.

Linares recordó que la falta de planificación del presupuesto para este año, por parte de la anterior gestión, ocasionó que el servicio reduzca sus frecuencias en las siete rutas dado que los buses no tenían diésel por falta de recursos económicos.

Con el Plan Operativo Anual (POA) reformulado, se palió esta situación y se garantizó que el servicio tenga diésel hasta fin de año, al igual que la renovación del seguro para los buses.

Como una de las medidas urgentes para reducir el gasto, Linares dijo el lunes que hasta el momento se redujo el personal entre 70 a 100 funcionarios, dado que el 67% del presupuesto está destinado al pago de salarios.

Para garantizar el servicio de los buses municipales, la Alcaldía ha previsto una reducción de gastos de funcionamiento de 55 a 32 millones de bolivianos el 2022, además de la explotación de la publicidad, dentro y fuera de los buses, y  el rediseño de las rutas para hacerlas más eficientes y rentables.

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