AMUN/7-12-21
Jacarandas, Acacias, Keñuas, Tecomas, Taras, Kiswaras, Keñuas, Molles y Olmos son algunos de los 886 arbolitos con los que se reforestan plazas y áreas verdes de la ciudad de La Paz, en los primeros días de diciembre.
“Seguimos nuestro trabajo de reforestación, el 1 de diciembre empezamos con 108 plantines en la calle 21 de Calacoto y calle Julio Patiño del macrodistrito Sur”, destacó el director de Áreas Protegidas, Bosques y Arbolado Urbano, Marcelo Lorberg, en entrevista con la Agencia Municipal de Noticias (AMUN). Desde mayo hasta noviembre, la Alcaldía de La Paz ya reforestó la urbe con 9.089 árboles.
Explicó que en esa zona coordinaron la actividad con el colectivo “Piensa Verde” y también colocaron vallas protectoras. El 3 de diciembre, con apoyo de los vecinos de Alto Pajchani, plantaron 95 arbustos en el barrio Central Tacagua; ese mismo día, esta vez con estudiantes del Colegio San Calixto, arborizaron con 85 especies en el Nudo Autopista del macrodistrito Max Paredes.
El 4 de diciembre, con la participación de un centenar de funcionarios de la Autoridad de Impugnación Tributaria, se plantaron similar cantidad de árboles en la Plaza de La Paz Mundial, ubicada en la calle 10 de Achumani. Los plantines empleados son especies nativas que se adaptaron al clima de los valles secos interandinos, como La Paz, necesitan menos agua que un pino o eucalipto.
Lorberg detalló que las otras zonas que visitaron hace un par de días fueron Isla Verde, donde plantaron 80 árboles; en cercanías al Hospital Municipal La Portada, 23; y en el exrelleno de Mallasa, con colaboración de Capital SAFI, 60, y otros 330 plantines se gestionaron con la Agencia de Cooperación Internacional de Corea, Koika.
Con gorras, sombreros y hasta paraguas para protegerse del sol, decenas de vecinos, estudiantes, voluntarios y funcionarios públicos se sumaron a las actividades de reforestación que impulsa la Alcaldía de La Paz. Las palas, picotas, abono, nutrientes y agua son los protagonistas.
“Los árboles producen oxígeno, purifican el aire, captan agua para los acuíferos, sirven como refugios para la fauna, reducen la temperatura de la superficie terrestre y regeneran los nutrientes del suelo”, explicó el director.
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