La Paz/AMN.- Desde el pasado martes 30 de abril, día que sucedió el deslizamiento Kantutani, y en el que 180 familias fueron afectadas, varios ciudadanos y “héroes reales” se organizaron para brindar algún tipo de ayuda, ya sea con donaciones o con acciones sociales en los campamentos que se habilitaron para el refugio de los damnificados.
Según testimonios de varias personas que ayudaron a los afectados, cuentan que ya pasaron por situaciones similares y saben lo que se siente vivir este tipo de tragedias y perder todo “de un día para el otro”.
Por ejemplo, la señora Daria Aruquipa Huanca, dueña de la empresa de mochilas Under Ocean ayudó a los niños regalándoles mochilas para que puedan retomar sus estudios lo más pronto posible. Ella cuenta que años atrás perdió su casa en el deslizamiento de Cotahuma y al haber pasado esa experiencia llegó a los campamentos para dar un aporte.
“Quiero ayudar personalmente a todos los que están pasando por esta situación, sé que es un momento difícil, pero también sé que ellos podrán salir adelante y mejorar su vida como la tenían antes”, manifestó la entrevistada.
A partir de este evento, varios grupos de voluntarios se prestaron a ayudar rápidamente a los damnificados, entregándoles todo tipo de víveres. Tal es el caso del voluntariado “Dar y Recibir”, que es uno de los que ayudó de gran manera desde el primer día de la emergencia.
Este grupo de voluntarios está conformado por 12 personas, logró recolectar artículos de higiene, además de fruta, comida y coca; se dividen en varios grupos y todos los días se aproximan a los campamentos a brindar colaboración.
“Es una situación lamentable la que se vive en el lugar y los que hemos pasado por una situación similar entendemos lo que es vivir en una carpa, sin las comodidades que tenías antes. Esta situación nos afecta personalmente pero a la vez nos impulsa a seguir trabajando, a recolectar cosas para ayudarlos y aunque somos conscientes de que no podremos calmar el dolor que estas personas sienten, por lo menos estamos poniendo nuestro ‘gramo de ayuda’”, manifestó la encargada del voluntariado “Dar y Recibir”, Yovana Cerruto.
A la vez, la Policía Boliviana y el voluntariado del personal de Bomberos, brindaron su atención a los damnificados las 24 horas, con la disponibilidad de acudir a cualquier emergencia, según se constató en los campamentos.
“El Comando Departamental, con todo su personal está realizando el trabajo de seguridad y precaución, principalmente estamos realizando el trabajo de cuidar el ingreso de las personas al área del desastre para que puedan recuperar sus cosas, estamos organizados en turnos y permanentemente durante las 24 horas del día, hay personal ayudando a todos los que nos necesitan”, manifestó el coronel, Freddy Veira, responsable de uno de los grupos de policías desplegados en la zona del deslizamiento.
De la misma manera personal del cuerpo de Bomberos se encuentra atento a cualquier emergencia, principalmente la de atención médica.
“Estamos prestos a ayudar las 24 horas del día, ayudando a las personas que necesiten nuestros servicios, al principio ayudamos a todas las personas a recuperar sus cosas y ahora brindamos atención médica, nosotros podemos quedarnos toda la noche o todo el día si es necesario, todo por el bien de la población”, comentó uno de los voluntarios de este grupo de auxilio, que no quiso identificarse.
Y es así como integrantes de distintas instituciones aún continúan con el servicio de todo tipo de ayuda a los damnificados por el deslizamiento. Otro grupo de la población también prestó ayuda a las mascotas, para los niños se recibieron gran cantidad de insumos escolares, se habilitaron espacios de juegos y recreación. También hubo ayuda terapéutica para los damnificados.
