La Paz/Cosas Claras.- El hecho de que una mujer en La Paz perciba 1.060 bolivianos menos en salario que los hombres; que el trabajo por cuenta propia sea del 31% frente a un 21,4% del hombre; o que el 7,8% realice trabajos sin remuneración frente al 4,2% del hombre, demuestra que ellas siguen en una sociedad inequitativa.
Los datos de la situación socioeonómica y laboral −extraídos de los Estudios estadísticos de la Secretaría de Planificación del GAMLP−, permiten ver que la mujer tiene un papel relevante en la economía paceña, pero al mismo tiempo demuestra que sigue sufriendo vulneración a sus derechos.
En criterio de la secretaria municipal de Desarrollo Social, Rosmery Acarapi, los datos de violencia, registrados en los SLIMS, muestran que “la mujer (niña, adulta, adulta mayor) sigue siendo víctima de violencia” debido a su vulnerabilidad.
“La mujer es la población vulnerable a violación de derechos desde el punto de vista físico, psicológico y sexual, hasta la dependencia emocional”, explica.
Desafíos
Ante esta realidad de las desigualdades en el ámbito económico, laboral, educativo y la violencia en contra de la mujer son motivos para “continuar trabajando en la inclusión” con proyectos y obras de infraestructura, dice el secretario municipal de Planificación para el Desarrollo, Marcelo Arroyo.
Por ese motivo, desde la Comuna se impulsa programas y proyectos que orientados a combatir la violencia en razón de género, a través de la prevención y la atención. Además, desarrolla acciones para promover la participación de esta población en los ámbitos económicos políticos y sociales.
La Alcaldía cuenta con el Plan Integral La Paz 2040 y del Plan Territorial de Desarrollo Integral, en el marco de la Agenda 2030 y los ODS, que considera los lineamientos que contribuye a lograr la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en el municipio con el fin de aprovechar su aporte al desarrollo sostenible.
