La Paz/AMN. – El Gobierno Autónomo Municipal de La Paz (GAMLP) tiene la facultad exclusiva de administrar, gestionar y planificar el “Área Protegida Municipal Bosquecillo de Auquisamaña”, según la Constitución Política del Estado. El Banco Unión deberá ajustar sus actividades en ese espacio al plan de revitalización que hace la Alcaldía, informó el secretario municipal de Gestión Ambiental, Ronald Pereira.
La autoridad aseguró que el derecho propietario debe ser demostrado por la entidad financiera en el escenario que corresponda, “sin embargo, este tema está completamente al margen de la gestión y la administración del territorio, cuya facultad es exclusiva del Gobierno Municipal, considerando que se trata de un área protegida”, enfatizó Pereira en un acto en el Palacio Consistorial, donde entidades ciudadanas y cívicas firmaron un pronunciamiento en defensa del área.
La Constitución Política del Estado, en su artículo 302, parágrafo I, inciso 5 dispone entre las facultades exclusivas para las alcaldías el de “preservar, conservar y contribuir a la protección del medio ambiente y recursos naturales, fauna silvestre y animales domésticos”.
El municipio paceño posee el 78% de las 205 hectáreas, saneadas, con Folio Real y Registro Catastral. Los otros propietarios, “así sea que ellos tengan el derecho propietario en un aérea municipal, tienen restricciones de uso, de realizar actividades. Cualquier cosa que quieran hacer allí tiene que estar en función de una planificación municipal”, agregó Pereira.
La Alcaldía tiene el respaldo legal de la Ordenanza Municipal (OM) 025/2002 de 21 de marzo de 2002 que declara como área protegida. Esa norma fue elevada a rango de Ley 3137 del 10 de agosto de 2005. Y mediante la OM 405/2006 del 13 de octubre de 2006 se delimitó el área.
El 1 de diciembre de 2020 se hizo un levantamiento de hitos y mojones en la parte noreste del área. Sin embargo, el personal de seguridad de la entidad financiera perjudicó las tareas ediles desarrolladas en el sector. Luego, el 10 de diciembre se hizo el replanteo topográfico y el 30 de diciembre, mediante nota, se remitió al Banco Unión el informe de los puntos limítrofes.
El 14 de enero de 2021 se informó a la entidad financiera que la revitalización continuará y solicitó que instruya retirar a su personal de seguridad física. El 12 de febrero, cuando los funcionarios intentaron trabajar, fueron amedrentados e impedidos por los dependientes del Banco Unión. “Es una afrenta al medioambiente, una amenaza al patrimonio cultural del municipio y una vulneración de los derechos ciudadanos de contar y disfrutar de un ambiente sano, equilibrado y protegido”, sostuvo Pereira.