La Paz/AMN. – En el macrodistrito rural de Zongo, el aislamiento voluntario y la prohibición de visitas al área urbana son dos de las medidas asumidas para evitar la propagación del COVID-19. También se procede a la desinfección en puntos estratégicos, se realizan las visitas de médicos a las comunidades y se recomienda el consumo de hierbas medicinales de parte de la población, acciones que han permitido tener un silencio epidemiológico en la zona.
Según el Observatorio COVID-19, en el municipio de La Paz hay, en cifras generales de la pandemia, 17.625 casos positivos, de los cuales en Zongo solo se registró uno, aunque “esa persona pertenecería a otro municipio (…). Hasta ahora no tenemos registrado ni un solo caso positivo”, informó la directora de Gestión Social y Promoción Económica de la Subalcaldía, Felipa Quispe.
La Compañía Boliviana de Energía Eléctrica S.A.(Cobee), asentada en el Valle de Zongo, habría reportado siete casos de coronavirus pero “son empleados que no son del lugar, los cuales se han replegado y aislado”, comentó la funcionaria edil. Ella prevé que el rastrillaje masivo que habrá en el municipio de La Paz permitirá “talvez” ubicar a alguna persona que tenga la enfermedad.
Desde la llegada de la pandemia, los habitantes de Zongo Valle y Zongo Trópico determinaron no salir de sus comunidades y tampoco permiten el ingreso de visitantes de la zona urbana. Con autoridades locales se implementaron puntos de fumigación.
“Si en la comunidad hay 30 personas, el secretario general está pendiente de qué persona ajena viene. Si va un familiar (de La Paz), de manera inmediata lo hacen regresar, por el momento no reciben a nadie, solamente tienen que estar los comunarios”, explicó.
