Conozca las dos ‘reglas de oro’ para beneficiarse de la tarifa de transbordo de Bs 0.80 en La Paz BUS.

Miércoles 20 de febrero de 2019. 01.20 de la madrugada. La calle está fría y llueve. Camilo tiene 11 años, su bicicleta se ha roto, siente frío y está solo y asustado. No tiene dinero para volver a su casa y llora desconsolado. A lo lejos un vehículo luminoso se acerca y frena; sus problemas han terminado, es un Pumakatari. La anfitriona y el conductor lo confortan, le abrigan y con una llamada al Centro de Control y Monitoreo ponen en movimiento toda una maquinaria que mueve a funcionarios de La Paz Bus, de la Defensoría de la Niñez y la Guardia Municipal. En pocas horas Camilo ha regresado a la seguridad de su hogar.

La Paz Bus y el Pumakatari cumplen hoy cinco años de servicio y el relato del párrafo precedente, que cuenta una historia real y cotidiana permite entender la naturaleza de un sistema de transporte con cuerpo, con alma y con corazón.

“Ha sido un trabajo sin duda sensacional, de muchísima gente que nos ha brindado su apoyo y esfuerzo. Son cinco años de un trabajo muy duro para brindar el mejor servicio de transporte que tiene Bolivia en este momento, el único sistema de transporte masivo que tiene La Paz”, asesor del GAMLP, Gustavo Bejarano.

El servicio

“El pumita”, como los usuarios lo llaman, tiene la característica de ser puntual. Recorre la ciudad de lunes a domingo y las 24 horas del día. El único día que descansa es cuando hay jornadas electorales.

Para el director general de La Paz Bus, Edward Sánchez, el Pumakatari es muy especial. Entre las cosas que atesora en el estante de su oficina hay una matraca con forma de un bus Pumakatari que le obsequió uno de los artesanos de la ciudad. Para él, haber llegado a los cinco años de funcionamiento implica una gran transformación no solo del transporte sino también de los ciudadanos.

“Le dimos al paceño la facilidad de encontrar una nueva modalidad de transporte que se diferencie del tradicional, en su calidad: en el tipo de vehículo que utiliza, el trato que recibe y del servicio que da”, aseguró Sanchez.

Ambas autoridades coincidieron —por separado — en que La Paz Bus alcanzó ese anhelo de los paceños de tener un transporte que cumpla sus rutas de parada a parada, que los lleve cómodos además de seguros, donde los traten bien y los lleven con un pasaje accesible.

El servicio

“El pumita”, como los usuarios lo llaman, tiene la característica de ser puntual. Recorre la ciudad de lunes a domingo y las 24 horas del día. El único día que descansa es cuando hay jornadas electorales.

Para el director general de La Paz Bus, Edward Sánchez, el Pumakatari es muy especial. Entre las cosas que atesora en el estante de su oficina hay una matraca con forma de un bus Pumakatari que le obsequió uno de los artesanos de la ciudad. Para él, haber llegado a los cinco años de funcionamiento implica una gran transformación no solo del transporte sino también de los ciudadanos.

“Le dimos al paceño la facilidad de encontrar una nueva modalidad de transporte que se diferencie del tradicional, en su calidad: en el tipo de vehículo que utiliza, el trato que recibe y del servicio que da”, aseguró Sanchez.

Ambas autoridades coincidieron —por separado — en que La Paz Bus alcanzó ese anhelo de los paceños de tener un transporte que cumpla sus rutas de parada a parada, que los lleve cómodos además de seguros, donde los traten bien y los lleven con un pasaje accesible

Parte de la ciudadanía

El ‘‘Puma’’ es un símbolo más del imaginario paceño. En estos cinco años, la ciudadanía le tomó cariño y no solo lo demuestra usando el servicio habitualmente sino con su actitud de resguardo, y, en algunos casos, de defensa a este. “Las personasnos recibieron con los brazos abiertos”, “los vecinos nos defendieron cuando algunos se opusieron”, “nos protegieron con sus manos ante amenazas directas”, “nos abrazaron cuando más lo necesitábamos”, fueron algunas de las frases de los operadores de los buses.

La alegría de la inclusión

“El PumaKatari es una herramienta muy importante para que podamos eliminar todas barreras arquitectónicas que tenemos en la ciudad de La Paz, para transportarnos y llegar a nuestros destinos”, destaca la concejala Andrea Cornejo.

Además de que el bus cuenta con una rampa, para silla de ruedas, el personal pasó talleres de capacitación y de sensibilización para ofrecer un buen trato a las personas con discapacidad. Esto generó alegría y un sentimiento de inclusión en esa población.

Esperanzas para los adultos mayores

Usuarios de la tercera edad se apropiaron de los buses, pasean por todas sus rutas. Gracias a la seguridad que brinda el Pumakatari no necesitan estar acompañados por sus familiares, además pagan una tarifa preferencial.

“Es un buen servicio del Pumakatari, no es como el del transporte público que te trata mal, te gritan, te botan y paran donde sea. Tiene paradas específicas y una buena atención”, dice don Fabián Choque, usuario habitual del servicio.

Zonas alejadas

El anhelo de Wendy Patón, de 23 años, era que de noche pueda llegar de forma segura a su hogar, ubicado al ingreso de Chuquiaguillo. Su deseo se cumplió desde que funciona la ruta integradora, que abarca tres macrodistritos. “Ahora es más accesible y es más rápido. Ya no hay que estar en la trancadera que hay cuándo se viene por Villa Fátima”, dice mientras acurruca a su bebé.

“Mi hijita está acostumbrada a que le traiga en el Pumakatari, se siente bien”, concluye.

La nueva wawa

El Bus Sub alimentador (BSA) llegó a La Paz en diciembre de 2018. Este es más pequeño, pero tiene las mismas bondades que el Pumakatari. Fue creado para llegar a los sitios a los que no puede llegar el ‘‘Puma” por su tamaño.

Será bautizado en unos días y, recién se definirá la ruta que recorrerá. El prototipo del BSA ya dio vueltas en la caótica ciudad, principalmente en las empinadas calles, y recibió el cariño de quienes lo vieron.

Pumitas y usuarios de cuatro patas

Con el nacimiento del Servicio de Transporte Municipal (Setram), los animales también fueron beneficiados. Los usuarios de cuatro patas son bien recibidos en el bus; por seguridad estos deben ingresar con bozal, sino llevan uno los anfitriones les prestan. En el caso de los perros lazarillo, el bozal no es necesario.

Además, el Setram acogió a los perros abandonados en los patios en calidad de guardianes del Pumakatari.

Transparencia

“Debe ser el proyecto público más auditado en la historia, de la gestión pública de la Alcaldía de La Paz, todos los días tenemos solicitudes y peticiones de informe de auditorías, de Contraloría, de varios ministerios, como el de Transparencia, el viceministerio de Transporte, de Diputados, de la Gobernación, etc. Las respondemos inmediatamente y nos llena de orgullo porque demarca el esfuerzo realizado, la transparencia es indispensable para cualquier proyecto público”, dice Gustavo Bejarano, asesor del GAMLP.

Deja un comentario