La Paz/AMN.- El Alcalde de La Paz, Luis Revilla, planteó hoy conformar una mesa de trabajo con el Gobierno nacional para definir la compra de vacunas o coadyuvar en el plan de inoculación. Aseguró que hay coordinación interinstitucional.
La autoridad explicó que a partir de esta comisión técnica el Ministerio de Salud podrá explorar las alternativas de importación de vacunas que requiere La Paz. Para el municipio se pretende comprar 250.000 dosis. “Es simplemente un tema de llevar adelante una coordinación a partir de una nota que nosotros vamos a enviar”, enfatizó el munícipe en La Razón radio.
Revilla mencionó que la adquisición se gestiona en conjunto con la Alcaldía de El Alto y las gobernaciones de Tarija y Santa Cruz. Reiteró que el Decreto Supremo 4432 autoriza a los gobierno subnacionales comprar la vacunas contra el COVID-19 pero mediante proveedores en el mercado interno; en esa línea informó que en conversación con la ministra de la Presidencia, Maria Nela Prado se coincidió en la importancia y urgencia de inmunizar lo más antes posible a la ciudadanía.
“No hay en absoluto” un roce institucional, dijo el Alcalde paceño sobre algún posible desentendimiento con el Gobierno nacional por las vacunas. Mencionó que los ‘dichos’ de personajes políticos solo generan una ‘susceptibilidad electoral’. “Por eso es que estamos en conversación con el propio Ministerio de Salud para que hagamos la compra con ellos mismos”, agregó.
Revilla ve que las vacunas estarán en La Paz luego del 7 de marzo, fecha de las elecciones subnacionales. Considera que en la mesa de trabajo se deberá conocer el cronograma para el arribo de los fármacos que tiene el Gobierno y así definir si la adquisición propia de la Alcaldía genera algún cruce de tareas o si el dinero proyectado debe destinarse a brigadas de vacunación.
El burgomaestre aseguró que la Alcaldía mantendrá las acciones vigentes en la pandemia ante posible riesgo de la tercera ola de la pandemia, pese a que el reporte del Servicio Departamental de Salud (Sedes) refiere que la segunda fase de la enfermedad está en una meseta de contagios.