AMUN/23-11-22
Para la época de lluvias, la Alcaldía de La Paz propuso este miércoles a los vecinos verificar el estado de sus cubiertas, las cañerías de desagüe, las canaletas, entre otros, para evitar posibles inundaciones en las casas y actividades económicas de la ciudad.
“Las personas deben verificar el estado de sus cubiertas, hay que ver el estado de las calaminas cubiertas, hacerle un refuerzo en caso de que sea necesario, verificar la situación de ventanas, puertas, las bajantes, las canaletas deberían estar limpias y evitar el tema de inundaciones de las viviendas, baños, cocinas, patios que deberían tener una revisión en los sistemas de drenaje domiciliario, sobre todo las cámaras de inspección, ver que no estén obstruidas”, explicó el secretario municipal de Gestión Integral de Riesgos (SMGIR), Juan Pablo Palma, en Panamericana.
Explicó que por el tipo de sistemas de alcantarillado que tiene la ciudad “a veces se combina el fluvial con el sanitario, no es lo correcto”, pero, afirmó, “lastimosamente así están los sistemas en la ciudad” de La Paz.
Palma puso de ejemplo las grasas que se generan en cocinas de restaurantes o negocios que comercializan alimentos, salen calientes y se mezclan con el agua fría, situación que provoca la solidificación de las mismas y taponea las tuberías. “Eso provoca retorno de agua o que la capacidad del colector se vea afectada o reducida, esas cosas tendrían que realizar en lo posible de manera inmediata en las viviendas”.
Palma explicó que para atenciones mayores instancias como la Policía Nacional, la Unidad de Bomberos Antofagasta o la Unidad de Tránsito serán las que den asistencia junto con la Alcaldía de La Paz y sus grupos de atención de emergencias. Sin embargo, dijo, la ciudadanía debe actuar con responsabilidad y hacer las limpiezas que correspondan en sus sistemas de drenaje, sus canaletas y bajantes para evitar daños.
Otro factor que influye en el incremento de las emergencias en tiempos de lluvia es el proceder de grupos de loteadores y avasalladores de tierra que se dan a la tarea de talar árboles cerca de los lechos de los ríos o en los canales abiertos, situación que provoca material de arrastre y el desborde de los afluentes.
“Reflexionar una vez más, ha sido un año donde se ha visto mucha tala de árboles en lugares protegidos con la intensión de lotear, gente inescrupulosa que daña al medioambiente, afecta a los árboles, cambia el comportamiento de las cuencas o de las microcuencas y todo con el afán de comercializar terrenos que a veces ni son dueños y van generando un conjunto de inseguridades a la población o movimientos de tierra exagerados”, explicó Palma.
Cuando por efecto de uso de maquinaria pesada se provocan movimientos de tierra, con la llegada de las lluvias ese material se convierte en un peligro porque arrastra piedras, tierra y restos de árboles talados, con las consecuentes afectaciones a viviendas.
Palma denunció que el pasado fin de semana hubo un problema que se suscitó por el material de arrastre en Auquisamaña. “En la parte superior, con la excusa de que son comunarios de otro municipio, siguen metiéndole tractores y movimiento de tierra de manera inescrupulosa, inadecuada, imprudente y poner en riesgo a la población que se encuentra en la parte baja de los taludes”, afirmó el titular de Riesgos.
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