AMUN/27-04-23
La investigadora en política de drogas Patricia Chulver contó este jueves historias de paceñas que usaron el aceite de cannabis para aliviar dolores: una mujer con cáncer avanzado de seno, otra con un posible daño neuronal tras una presunta mala praxis médica y una joven estudiante que hace frente a la fiebre reumática mientras mantiene a su familia, en el programa radial “El Negro en el Blanco de la Gente”, dirigido por el alcalde Iván Arias.
“Una de las historias más profundas y lindas que hemos querido retratar es la del alivio contra el cáncer de seno, es la historia de una mujer que tiene un cáncer avanzado en el pecho, no habían medicamentos para calmar el dolor. Entonces, gracias a sus amigos inició con las gotas del cannabis que es de muy difícil acceso”, comentó Chulver sobre la investigación que realizó y publicó en la revista Calle 2 de la Universidad Católica Boliviana, en marzo 2021.
La otra historia está relacionada con un posible daño neuronal tras una presunta mala praxis médica. Chulver cuenta que el parto fue el inicio de una historia de dolor que continúa. “Marlene (35 años) cuenta que todo empezó cuando tuvo a su hijo por cesárea y producto de la anestesia estuvo diez días sin poder caminar. Los médicos le dijeron que podía tratarse de un problema neurológico y que debía ir a un especialista. Asegura que esperó un año y medio para ser atendida por algún neurólogo en el ente de salud donde estaba asegurada; sin embargo, no tuvo éxito, ya que no la transfirieron y, al contrario, el diagnóstico de su cuadro cambiaba”.
La tercera historia está relacionada con una joven estudiante que hace frente a la fiebre reumática. “R. Mamani (27) recuerda su inicio en el consumo medicinal de la marihuana con la finalidad de aliviar los dolores causados por la artrosis. ‘Mi primera vez fue interesante (…) Si tomaba ibuprofeno cada ocho horas, intercalaba una dosis de ibuprofeno y una dosis de cannabis”, se lee en la publicación de Calle 2.
En el programa radial del burgomaestre emitido por radio Fides, Chulver recordó que tras las investigaciones que realiza “de ninguna manera se está tratando de inducir al consumo, ni nada relacionado, sino lo que se hace es reflejar historias de vida de personas que incurren en ámbitos grises, de alguna manera en prácticas ilegales, pero que justamente incurren a esto por la necesidad y el dolor” que les genera una enfermedad que padecen.
Por su parte, el alcalde Arias recordó que su madre sufría de glaucoma y al buscar un remedio le recomendaron aceite de cannabis, lo que en ese momento le alarmó, pero ahora comprende el enfoque medicinal del mismo. Chulver indicó que la Ley 913 de Lucha Contra el Tráfico Ilícito de Sustancias Controladas, en su Art. No 19, contempla investigaciones sobre estos temas y al cannabis con un enfoque medicinal, no obstante, la normativa carece de reglamento.
“Que el Estado regule una cierta sustancia (como el cannabis) incide que en ciertos sectores baje el consumo”, indicó Chulver, a tiempo de comentar que desde el 2016 son más visibles grupos legalizacionistas de cannabis y hay una ola de movimiento cannabico en el país, además de iniciativas presentadas por la sociedad civil para importarlo legalmente.
La especialista realizó una tesis sobre la clandestinidad en la vida de pacientes que deben consumir cannabis ante una enfermedad. En tanto, en la revista Calle 2 de la Universidad Católica Boliviana se encuentra todo lo referido a políticas de drogas del mundo, historias detrás del cannabis, normativas punitivas en Bolivia.
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