AMN/12-11-21
Cuartos insalubres, bebidas alcohólicas adulteradas son algunas de las irregularidades que encontró este viernes por la noche el alcalde Iván Arias en los 60 lenocinios clandestinos clausurados en el centro paceño y anunció “controles más estrictos” en coordinación con efectivos de la Guardia Municipal y de la Policía Boliviana.
“Hemos identificado 60 bares y lenocinios clandestinos en un operativo coordinado; realizamos una intervención simultánea; las condiciones son realmente deprimentes. ¡Qué falta de humanidad! Estamos clausurando definitivamente”, afirmó el burgomaestre de La Paz, que lideró el “megaoperativo” junto a centenares de funcionarios municipales que se dividieron en cuatro grupos.
Habitaciones en penumbras y pequeños cuartos eran la característica de la mayoría de los prostíbulos e incluso en algunos casos, los rústicos y desgastados colchones estaban en el suelo. “Encontramos las condiciones más insalubres, son conejeras, hasta en el piso tienen relaciones sexuales, desgarra el alma ver todo esto”, expresó la autoridad.
Las intervenciones se realizan en la zona de San Sebastián, que comprende las vías Evaristo Valle, Apumalla, América, Ingavi, Pichincha y parte de la calle Figueroa y la plaza Alonso de Mendoza. Arias lideró un par de clausuras, luego de evidenciar las condiciones insalubres en la que atendían a los ciudadanos.
“Con la Policía haremos un control más estricto, esta es una zona de mucho peligro e inseguridad”, afirmó el alcalde de La Paz en contacto con los periodistas, quienes también vieron que en esos reducidos espacios no habían medidas de bioseguridad frente a la pandemia de la Covid-19 y que incluso vulneraban los derechos humanos de las trabajadoras sexuales y la privacidad de los clientes, porque instalaron cámaras.
En uno de los lenocinios, el alcalde Arias pidió el carnet de identidad a las personas que estaban dentro para coadyuvar a la labor de los policías. En el operativo se encontraron algunos cuartos destinados para que duerman personas en estado de ebriedad y al salir en algunos locales se observaron “altares” con figuras de sapos, dulces, como canela, anís y gelatina.
Asimismo, efectivo de la Intendencia Municipal constataron que los tragos y licores de una gran variedad de marcas, en su mayoría no tenían registro sanitario y eran adulterados; procedieron al decomiso porque es un atentado contra la salud. “Seguiremos interviniendo estos locales que no tienen permiso; alarma esta situación”, lamentó Arias.
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