AMUN/01-09-22
“Estamos felices y emocionados por el inicio de obras en la refacción de la infraestructura de nuestra unidad educativa, ya que es importante contar con una construcción segura”, dijo Julio César, un niño del Kínder Tokio del turno de la tarde, durante el acto de inauguración de trabajos en este edificio escolar que también alberga al Kínder Sucre, en el turno de la mañana.
El discurso del niño vestido con un guardapolvo de color rojo, se quedó corto ante las muestras de cariño de los alumnos de las unidades educativas Mariscal Sucre y Tokio, del turno diurno y turno de la tarde, respectivamente, hacia el alcalde Iván Arias, quien llegó al lugar ubicado en el Casco Urbano Central, en la mañana de este jueves.
La autoridad fue recibida por las maestras y dirigentes de la junta escolar con el marco musical de una batucada que le provocó bailar en su recorrido por el pasillo de ingreso al kínder y en medio de los infantes vestidos con guardapolvos verdes, café, amarillo y rojo, que estaban sentados en sus pequeñas sillas.
La alegría de los alumnos se exteriorizó también en su intervención en el acto de inicio de las obras. El primer niño que participó fue Jheremi, del Kínder Sucre, quien recitó el poema a la bandera con voz segura.
“Oh bandera tricolor, que flotando siempre así eres símbolo de amor para el pueblo en que nací porque siempre seas feliz, porque siempre seas inmortal. Prometo ser buen niño y trabajar por ti”, recitó el pequeño y al terminó arrancó el aplauso de los asistentes.
La inocencia y picardía de los niños también se vio en la canción La Niña de la Mochila Azul, que interpretó Santiago, también del Kínder Sucre. “Buenos días señor Alcalde, bienvenido a mi Kínder Sucre”, le dijo antes de cantar.
Luego, Julio César del Kínder Tokio, fue el encargado de dar el discurso de agradecimiento a nombre de los alumnos. “Es un honor para mí poder expresar estas palabras en presencia de tan respetables personalidades y más aún porque soy la voz del Kínder Tokio”, manifestó.
En esta inauguración, los niños fueron los protagonistas, ya que durante su discurso, el alcalde Arias dejó el atril y fue hacia los pequeños estudiantes para conversar con ellos y ellas. Preguntas como: “¿Quién tiene mascota?”, ¿Cómo ladra tu perro?, ¿Quién es tu profesora?, ¿Qué quieres estudiar cuando seas grande? y las respectivas respuestas de los niños, formaron parte del programa de inicio de obras.
“Yo quiero ser astronauta”, respondió uno de los niños. Mientras que una niña dijo “quiero ser veterinaria”. Otros más respondieron que quieren ser policías, médicos, odontólogos, soldados, chef y otro quiere construir una ambulancia.
Tras conversar con los pequeños, el alcalde prometió poner bonita esta infraestructura. “Vamos a ponerla más bonita, vamos a arreglarla, ya no va entrar agua”, dijo la primera autoridad del municipio paceño.
Apenas terminó esas palabras, los niños se aglomeraron alrededor suyo con la intención de treparse o subirse en él. Situación que no ocurrió ante la intervención de una de las maestras, aunque el alcalde estuvo dispuesto a levantar a algunos de ellos.
Obras que comenzaron
En el edificio escolar que alberga a las unidades educativas Mariscal Sucre y Tokio, se ejecutarán trabajos de refacción en la batería sanitaria, el mejoramiento en el piso del patio, cambio de cubierta en el sector de la rampa y trabajos hidrosanitario.
En la parte de refacción de la batería sanitaria se realizará el cambio de piso, cambio de revestimiento en los muros, el pintado de paredes y el cielo raso, ampliación de lavamanos y urinarios. En el patio se conducirá las aguas pluviales de las bajantes hacia el alcantarillado y se pondrá cerámica en el piso.
En la rampa se ejecutará el cambio de cubierta de calamina y el revoque y pintura en el cielo raso. En tanto el trabajo hidrosanitario se refiere al cambio de la instalación sanitaria y artefactos, además de la ampliación de urinario y lavamanos.
Las obras serán ejecutadas en un plazo de 60 días y se invertirá 97.782 bolivianos, según la ficha técnica de refacción y mejoramiento de esta infraestructura.
En este acto de inicio de obras, la secretaria municipal de Educación y Desarrollo Social, Amparo Morales, destacó que esta unidad escolar es la primera del macrodistrito Centro en ser refaccionada. Recordó que un total de 174 infraestructuras serán arregladas de manera integral con un presupuesto de 20 millones de bolivianos que son parte de un crédito gestionado por la Alcaldía de La Paz.
El representante de la junta escolar, Grover Bernal, y la directora de la Unidad Educativa Tokio, Lourdes Quispe, agradecieron por haberlos tomado en cuenta en la ejecución de refacciones y remarcaron la importancia y prioridad del arreglo de los baños.
“Año tras año hemos ido pidiendo la refacción de los baños que desde que se ha inaugurado el Kínder nunca se hecho una obra. Es muy antiguo ya no es adecuado para niños de cuatro y cinco años. Estas obras va a favorecerles a ellos (a los niños)”, afirmó el dirigente de los padres y madres de familia.
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