La Paz/AMN.- Don Hilarión Mamani, de 63 años, sale todos los lunes y miércoles de su casa en Villa Fátima. Con la ayuda de un bastón y confiando en la solidaridad de los transeúntes, logra abordar un minibús que lo lleva hasta la avenida Camacho. Luego camina hasta la Mariscal Santa Cruz esquina Colombia. Desde allí, su recorrido es más fácil, porque las aceras podotáctiles facilitan su recorrido.
“Generalmente, voy por la tarde porque a veces tenemos reunión en la Asociación donde pertenezco y al Club del Libro, también. Vivo en Villa Fátima, desde donde tomo la movilidad hasta la Camacho y de ahí paso hasta la Colombia, subo por el carril derecho, donde hay señalética”, cuenta.
Se estima que, al igual que don Hilarión, entre 100 y 200 personas ciegas circulan diariamente por la calle Colombia para llegar a las oficinas del Instituto de la Ceguera, que se encuentra en la calle Colombia, al frente de la iglesia de San Pedro.
Actualmente, el recorrido de las personas con discapacidad visual es más seguro porque sólo tienen que seguir “las rieles”, como denomina don Hilarión a las aceras con alto relieve. La aceras podotáctiles conforman una ruta que se encuentra casi al borde de la acera, lo que permite que la caminata de las personas se realice por el centro de las veredas.
“Las rieles nos benefician a todos. En la Paz somos casi 1.000 personas con discapacidad visual y nos facilita(…) Se me ha hecho un hábito porque antes había que estar tocando la pared, había letreros y nos chocábamos. Con la riel subimos como si no estuviéramos ciegos”, relató.
Circuito
El circuito con aceras podotáctiles o con alto relieve se comenzó a implementar en la ciudad de La Paz en 2011, con la construcción de la primera ruta y como parte del proyecto integral que incluyó la construcción de ductos para la migración de cables.
La misma se inicia en la calle Genaro Sanjinés, sigue por la Potosí, la Socabaya y concluye en la avenida Mariscal Santa Cruz, informó el subalcalde del Macrodistrito Centro, Fernando Valencia.
Las mujeres y hombres que se capacitan en el Centro Santa Cecilia, en la avenida Armentia, y del Centro de Rehabilitación Luis Braile, en la Genaro Sanjinés, caminan por esta ruta con la ayuda de su bastón.
El 2019 esta ruta creció porque se implementó un proyecto de ensanchamiento de acera que incluyó las baldosas podotáctiles en la avenida Sucre. El proyecto está en ejecución y hasta la fecha se colocaron baldosas con alto relieve, desde la esquina Jaén hasta la calle Genaro Sanjinés. Se prevé que continuará hasta la Colón.
Luego esta ruta se conecta con la calle Colombia para subir hacia la plaza San Pedro y sigue hasta la calle Zoilo Flores. Esta es la segunda ruta que fue construida en 2017, que utilizada por las personas que se dirigen o salen del Instituto de la Ceguera de La Paz.
“La idea es ampliar la ruta a la avenida Uruguay y a la avenida Montes para que las personas con discapacidad visual puedan desplazarse hacia sectores aledaños como la Terminal de Buses y El Prado para llegar a la plaza del Estudiante. Hasta la fecha se tienen alrededor de dos kilómetros de estas baldosas”, dice Valencia.
Ciudad inclusiva
Ambas rutas son parte del circuito que implementó el Gobierno Municipal en favor de esta población, en cumplimiento de la Ley Municipal 209 para las Personas con Discapacidad y construir, de esta manera, una ciudad inclusiva.
El artículo 20 del capítulo IV de accesibilidad de esta norma edil establece que la Alcaldía paceña debe ejecutar obras para eliminar las barreras arquitectónicas en favor de esta población.
“El Gobierno Autónomo Municipal de La Paz (…) ajustará y/o elaborará la normativa para la supresión de barreras arquitectónicas y uso del espacio público en el Municipio, con un contenido técnico, implementado medidas destinadas a favorecer la inclusión social de las personas con discapacidad”, se lee en el artículo 20.
Para don Hilarión, en los últimos años La Paz se ha convertido en una ciudad más accesible para él y sus compañeros.
“Antes se tenía que pelear mucho con la barrera arquitectónica, hoy por hoy, se trata de eliminarla. Yo creo que de una Ciudad Maravillosa hemos pasado a una ciudad del paraíso”, manifestó al referirse a esta ruta que camina al menos dos veces a la semana.
El subalcalde del Centro dijo que este circuito peatonal está dirigido a que todas las personas con o sin discapacidad puedan disfrutar de la ciudad.
“Tal es el caso de la avenida Sucre donde no se tenía un espacio para que puedan circular las personas en general y las personas con discapacidad visual, en específico”, resaltó.
Compromiso
Todas estas obras fueron ejecutadas como parte del Plan de Eliminación de Barreras Arquitectónicas con que cuenta la Alcaldía desde 2018 y en la búsqueda de construir una ciudad inclusiva hacia el 2040, subrayó, por su parte, la directora de Municipal de Atención Social, Daniela Jinés.
Además, manifestó que La Paz es el único municipio del país que tiene este plan y que conformó un Comité Multisectorial para la Accesibilidad. Ello demuestra que las autoridades municipales y la población con discapacidad trabajan en esta temática.
Sin embargo, para que estas acciones inclusivas tengan mejores resultados es también necesaria la participación, compromiso y respeto de la ciudadanía en general.
“La ciudadanía tiene que ser la que participe y la que apoye. Hemos tenido quejas de estos pisos podotáctiles de personas, de jovencitos o personas que no entienden y que están tratando de lastimar la inversión. Rayando, lastimando los pisos”, acotó Jinés.
Estas reacciones adversas –en opinión de la concejala de Soberanía y Libertad (Sol.Bo), Andrea Cornejo– se deben al desconocimiento de la ciudadanía en general sobre para qué sirven estas baldosas.
Para contrarrestarlas, Cornejo sugirió que se realicen dos trabajos. El primero, utilizar diseños con alto relieve más amigables con toda la población y, segundo, sensibilizar sobre el derecho de las personas con discapacidad visual de movilizarse en la ciudad.
“Es muy importante sensibilizar a toda la población sobre la importancia de la presencia de baldosas podotáctiles(…) La textura de las baldosas son gruesas, existen otros diseños que son amigables con todos, tanto para personas que no tienen discapacidad, como para otras que tienen alguna discapacidad”, sugirió la concejala.
Para Cornejo, La Paz avanzó en la construcción de una ciudad más inclusiva, tanto en materia legislativa como en la aplicación de las normas por parte del Ejecutivo. Se cuenta con la Ley Municipal 209 para las Personas con Discapacidad y el Plan de Eliminación de Barreras Arquitectónicas. Ambas impulsadas por el Consejo Ciudadano de Personas con Discapacidad.
La implementación del circuito peatonal para personas con discapacidad visual es uno de los resultados de la aplicación de ambas normas municipales.
