Un ejemplo de amor, responsabilidad y avance en el control de la sobrepoblación animal
ANUARIO 2024
AMUN/AGOSTO
El colegio Hugo Dávila, ubicado en la zona de Miraflores, se convirtió en el epicentro de una de las iniciativas más ambiciosas y conmovedoras de la ciudad de La Paz: la Campaña de Esterilización Masiva “Peluditos por el Bien Común”. Durante los días 24 y 25 de agosto, miles de ciudadanos se dieron cita en esta institución educativa, acompañados por sus perros y gatos, para participar en una actividad que marcó un antes y un después en el cuidado de las mascotas y el control de la sobrepoblación animal en la urbe paceña.
Una preparación que involucró a toda la comunidad
La campaña fue anunciada a finales de julio por el alcalde Iván Arias, quien destacó la participación de instituciones educativas como el colegio Hugo Dávila y La Merced, además de veterinarios y voluntarios provenientes de Oruro, Sucre, Santa Cruz y Cochabamba.
“Estos ambientes nos permiten recibir, operar, tener el postoperatorio y una sala de emergencias. Esto no es solo castrar y ya; es un trabajo integral”, explicó la autoridad edil durante la conferencia de prensa.
Desde el inicio, la iniciativa generó gran expectativa. En tan solo tres días, se registraron 1.240 mascotas a través de un sistema de códigos QR habilitado en las redes sociales del Gobierno Municipal y la Casa de la Mascota. La cifra se elevó rápidamente a 1.600 la semana siguiente, dejando clara la magnitud del interés ciudadano.
Historias que conectan
Entre las primeras inscritas se encontraba Celeste, una gatita de tres años con pelaje blanco y gris, llevada por su dueña María. “Pensé que la esterilización sería ese mismo día, pero ya estoy inscrita”, compartió emocionada. María destacó la importancia de la campaña, especialmente para prevenir el abandono de animales en las calles. “Es mejor tener uno o dos y cuidarlos bien. Muchos animalitos sufren en las calles”, reflexionó.
La historia de Celeste es solo una entre miles. La campaña no solo se enfocó en mascotas con hogar, sino también en perros y gatos callejeros, con el apoyo de asociaciones protectoras de animales y juntas vecinales que identificaron a los “peluditos” más vulnerables.
El día de la acción
La jornada inició con largas filas de personas acompañadas de sus mascotas. Veterinarios, estudiantes de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), la Universidad Pública de El Alto (UPEA) y la Universidad Loyola trabajaron en equipo, demostrando compromiso y profesionalismo. “Ya basta de animalitos que nacen en los ríos y calles. Esta campaña es una solución real”, señaló el jefe de la Unidad de Salud Integral de Animales y Zoonosis, Fernando Guzmán.
Al final del primer día, más de 1 mil cirugías habían sido realizadas. La organización fue clave, con áreas diferenciadas para registro, preoperatorio, quirófano y recuperación. “Estamos agradecidos con todos los que hicieron esto posible”, comentó la secretaria Municipal de Salud y Deportes, Fátima Verduguez.
Un impacto positivo
La meta inicial de 2.000 esterilizaciones fue superada. El balance final reveló que la campaña logró intervenir quirúrgicamente a 2.134 mascotas. Además del impacto en la sobrepoblación, esta iniciativa también destacó por fomentar la tenencia responsable y fortalecer el lazo entre la comunidad y sus mascotas.
El alcalde Arias cerró el evento con un mensaje esperanzador.“Este es un gran paso hacia una ciudad más compasiva y ordenada. Gracias a todos los que hicieron esto posible”, dijo.
La Campaña de Esterilización Masiva “Peluditos por el Bien Común” se consolidó como un ejemplo de cómo la unión de instituciones, voluntarios y ciudadanos puede generar un impacto positivo y duradero.
