La Paz/CosasClaras.- Son más de cinco años que Claudia (32) está buscando trabajo. A sus 27 años se tituló como Comunicadora Social con la esperanza de trabajar en alguna institución.
“He mandado mi currículum a todo lado, pero no he tenido suerte hasta ahora”, dice preocupada.
Ella aún depende económicamente de sus padres. Quiere independizarse pero no puede. “A veces quiero irme a Argentina a trabajar de costurera”, explica, pero sabe que no puede dejar a sus progenitores porque es hija única.
Al igual que Claudia, decenas de jóvenes buscan un trabajo formal, con todos los derechos laborales adquiridos, pero el mercado laboral aún no les da mucha oportunidad.
Por esto, La Paz tiene una tasa de desempleo de 10.8% de un total de 189.628 personas de 15 a 24 años, según la Encuesta Municipal de Empleo (2012) de la Alcaldía.
La relación de los jóvenes ocupados en el ámbito laboral que es de 32,8% y los inactivos de 56,5% refleja que los jóvenes “todavía no están insertos en actividad económica como tal”, dice el secretario municipal de Planificación para el Desarrollo, Marcelo Arroyo.
A esto se suma el incremento de esta población desempleada. “El desempleo juvenil (15 a 24 años) fue aumentando dramáticamente con el tiempo; en 2012 la tasa llegaba al 21,3%, casi el triple comparado con los adultos”, explica el estudio “Jóvenes y trabajo En el Municipio de La Paz” de 2015 del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla).
Cuello de botella
El promedio de edad de los 942.987 habitantes de La Paz es de 31 años, según proyecciones al 2018 elaborado por la Alcaldía. Esa gran concentración demográfica “representa un cuello de botella para los jóvenes al momento de conseguir empleo”, dice el Gerente del Instituto de la Juventud, Ronald Siles.
Ejemplo de esa situación adversa es que los jóvenes indicaron estar “buscando trabajo desde hace más de un año (28%)” en la ciudad de La Paz, según ‘Jóvenes y empleo’, un estudio de la Red de Líderes por la Democracia y Desarrollo (RELIDD) en base a una encuesta formulada a 320 jóvenes de 16 a 28 años en La Paz, Santa Cruz y Sucre en 2018.
Los jóvenes generan una “altísima demanda de empleo”, coincide la secretaria municipal de Desarrollo Social, Rosmery Acarapi.
Por esta alta demanda, es que los jóvenes además están expuestos para acceder a empleos precarios y a otros riesgos. Para Acarapi, la situación desfavorable de empleo aumenta la vulnerabilidad de esa población vinculadas a la “trata, explotación e inclusive pueden ser víctimas de tráfico; ya cruzando frontera, los llevan con el pretexto de que van a ganar mucho dinero”.
Política municipal
Ante esta problemática y pese que el empleo forma parte de una política económica nacional, la Municipalidad paceña realiza acciones vinculadas a la generación empleos y de emprendimientos con capacitaciones para la población joven. Arroyo explica que los gobiernos locales no tienen una competencia “directa” en la generación de empleos; sin embargo, se “estimula” el desarrollo económico local.
Las acciones están orientadas a la “transformación de la matriz económica y generación de oportunidades para capacitar y desarrollar emprendimientos, potenciar a la población joven, a que pueda desarrollar actividades económicas que a futuro les puedan generar algún tipo de rentabilidad”, destaca.
Uno de los pilares fundamentales para la generación de empleos y programa “estrella” de la Comuna es Mi Primer Empleo, que tiene el objetivo de incorporar a jóvenes en la administración pública con todo los beneficios y cargas sociales, previa evaluación y capacitación.
La otra iniciativa es el programa “EmpleARSE” que, junto al Instituto de la Juventud y una red de empresas líderes en Responsabilidad Social Empresarial (RSE), generan fuentes de trabajo en el sector privado.
“Nosotros evaluamos, seleccionamos y reclutamos a los jóvenes que tienen el interés de ser parte del empresariado privado. Tenemos alianza con varias empresas como para que ellos puedan demandar y tener estos jóvenes para poderlos formar y emplear”, explica Acarapi.
Todas estas políticas responden a los subejes ‘Inclusiva e equitativa’, del eje 4, y ‘Emprendedurismo e innovación”, del eje 5, de su “Plan La Paz – 2040”.
“La Comuna plantea como política de desarrollo la dinamización y articulación de la economía municipal y metropolitana a la innovación productiva y tecnológica, el fortalecimiento y el acceso a potenciales nichos de mercados internos y externos”, según Arroyo.
