AMUN/ 12-02-22
La Alcaldía de La Paz informó este sábado que debido al incremento de precipitaciones pluviales este mes de febrero, se intensificó la limpieza de las cuencas con 33 frentes de trabajo que atienden en el Orkojahuira, Choqueyapu y las afluentes del Sur de la ciudad, con turnos de trabajo que son de ocho horas de lunes a domingo.
La jefa de la Unidad de Gestión de Cuencas e Infraestructura de Prevención, María Luisa Padilla, informó que en estos últimos días se efectúan trabajos en 33 frentes de las referidas cuencas: siete en Orkojahuira; seis en Choqueyapu y 20 frentes en el Sur.
Al respecto, el director de Prevención de Riesgos, Juan Pablo De La Fuente, explicó que este mes el uso de maquinaria en las cuencas es diario dado que se conforman camellones con material de arrastre acumulado que es situado en promontorios a la vera de los ríos. En caso de que la lluvia provoque movimiento de material, la maquinaria vuelve a intervenir las cuencas para hacer la limpieza.
“No hemos dejado de trabajar todos los días, hay veces que algunos puntos que tiene trabajos terminados se deja de trabajar un tiempo de tres días y volvemos a meter maquinaria porque sabemos que va a ocurrir. En Huayñajahuira, que son como el arenal, en enero hemos seguido metiendo maquinaria permanente, de todos modos, aunque no llueva, en toda la longitud de río se hacen camellones; no hemos parado un día desde el 1 de febrero”, informó De La Fuente.
En lo que va de febrero, la Alcaldía de La Paz atendió 832 casos de emergencia de diferente magnitud, desde sumideros obstruidos que se constituyen como los casos más frecuentes, hasta la caída de material de talud, muros y hundimiento de vías.
Durante la semana, además de los sábados y domingos se trabaja en turnos de ocho horas y se emplea 21 equipos pesados: ocho excavadoras, 13 topadoras y un promedio de cuatro volquetas por día.
El camellonado es una técnica que se utiliza para retirar material de arrastre del caudal del río que es colocado en las orillas del cauce para evitar que se formen ondas punzantes cuando llueve con fuerza.
“Parece camellos que básicamente sirven para limpiar el cauce del río para que no tenga un montón de tierra al medio, toda la tierra que se acumula, se llama material, sedimentos, después de una riada que puede ser pequeña o de mediana magnitud, los ríos del Sur siempre van a arrastrar ese material y va a quedar al medio, lo que se hace con la maquinaria es camellonar, llevar ese material a los costados del río para que cuando haya otra riada no se lleve desde el medio el material y lo arrastre hasta dentro del caudal”, detalló la autoridad edil.
Para este sábado, prosiguió, 45 frentes de trabajo iniciaron sus tareas en ríos como el Aruntaya, el Huayñajahuira, el Choqueyapu o el Viscachani. Muchos de estos afluentes confluyen en otros y, por ende, crece el material arrastrado.
“El Orkojahuira tiene de cabecera el Moluyo e Itapilpuni, que son dos ríos que se juntan y forman el Minasa, todos esos ríos son cabeceras, es una afluente principal del Orkojahuira, se los limpia porque tienen mucho material de arrastre, el Rosasani es grande y tiene harto material de arrastre y en cabecera, así los vamos limpiando. Lo peor es que estos ríos tienen más abajo, en la parte urbana, bóveda, entonces sí o sí tenemos que evitar que toda esa tierra llegue a la bóveda porque la va a obstruir y puede haber sifonamientos, colapso de bóveda y eso afecta a las vías o infraestructura pública”, explicó De La Fuente.
El equipo de la Secretaría Municipal de Gestión Integral de Riesgos (SMGIR) rota en los frentes de trabajo de acuerdo a las lluvias, al rol de mantenimiento de los ríos o a la necesidad de retiro de material arrastrado por las precipitaciones.
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