Además se decomisó 17 kilos de pescado en mal estado
AMUN /03-10-24
En un operativo que realizó la intendencia Max Paredes este jueves, retiró un puesto de comida ambulante que estaba al lado de un basurero y sumidero en la avenida Calatayud el cual representa un gran riesgo a la salud. Además decomisó 17 kilos de pescado en mal estado.
“En la calle Calatayud hemos identificado dos actividades ambulantes es decir puestos de comida que no tenían autorización y tampoco carnet de manipulación de alimentos, uno de ellos era el más riesgoso porque estaba al lado de un contenedor de basura y de un sumidero”, afirmó la intendente del macrodistrito Max Paredes, Karina Oblitas, al resaltar que eso representa un “riesgo sanitario”, porque “los basureros empiezan a emanar gases de los residuos, tanto líquidos y gaseosos, lo que incrementa el riesgo de padecer cualquier enfermedad”.
Además en ese puesto se encontró llajua fermentada y la bolsa nylon donde guardaba sus carnes estaba fundido por el calor. Además el contenedor de plastoformo donde guardaba la comida tenía residuos secos de comidas de pasados días.
Por ello, se decomisó utensilios derretidos y por las faltas, se retiró a la vendedora. Recordó que “como ambulante también debería tener autorización, pero no contaba, entonces era una actividad ilegal”.
Asimismo remarcó que en la calle Max Paredes, se volvió a decomisar 17 kilos de pescado en estado de descomposición y mal conservado, de los puestos de venta de este tipo de carne. “En esos puestos también se decomisó utensilios en mal estado por contaminación”
Ante ello, Oblitas recomendó a la población identificar las actividades económicas que están cerca de basureros y sumideros y denunciarlo para que la intendencia haga la intervención y respecto a los pescados, que verifiquen el producto antes de comprar: los ojos deben ser transparentes, las escamas deben salirse fácilmente, la piel debe tener un tono rosado y no debe tener mal olor.
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