La Paz/AMN.- Tras permanecer cuatro días en el Centro de Aislamiento y después de dar negativo a las pruebas de COVID-19, este domingo fueron dadas de alta 88 personas que forman parte del personal de salud del hospital de Caranavi y sus familiares que llegaron a La Paz la madrugada del jueves. Dentro de este grupo numeroso están las 18 personas sospechosas de tener la enfermedad que estuvieron en contacto con el paciente cero de esa localidad paceña.
“La labor que se ha hecho es realmente importante, porque hemos descartado que los 18 pacientes que actualmente están yéndose no tienen la enfermedad, pero aun así se les pide, de acuerdo a la literatura, de que ellos puedan cumplir los 14 días de aislamiento llegando a Caranavi”, dijo el responsable del Centro de Aislamiento, Álvaro Cabezas.
Si bien han sido dados de alta 88 pacientes que retornan a Caranavi, otros ocho fueron trasladados ayer al Hospital Santiago II, de los cuales siete permanecerán aislados, y uno porque dió positivo al Coronavirus. Estas personas dependen del seguro de la Caja Nacional de Salud. Con la salida de este grupo numeroso de personas, quedan 50 pacientes en el Centro de Aislamiento.
Destacan la buena atención
Varias personas consultadas por la Agencia Municipal de Noticias pusieron de relieve la atención recibida en el Centro de Aislamiento, antes de abordar el bus para emprender el retorno a su comunidad
“Estamos retornado con los resultados negativos, agradecerle a Dios y al director del centro. Queda seguir adelante con el apoyo de Dios y esperando que esta pandemia desaparezca”, dijo una de las profesionales de salud atendidas en el centro. “Nos hemos sentido como en casa, agradecerles por toda la atención y por la bienvenida que nos han dado”, dijo otra de las personas consultadas.
Un persona que hacía fila para ingresar al bus manifestó su felicidad por retornar a Caranavi y calificó de “muy buena” la atención recibida. Recomendó que la ciudadanía se cuide, “que se lave las manos, que es lo más primordial”.
El dirigente nacional de la Confederación de los Trabajadores en Salud Pública de Bolivia, Rolando Condori, recordó que el repliegue de los trabajadores de salud de Caranavi el pasado miércoles se debió a las agresiones sufridas por un sector de la población que, según explicó, actuó de forma agresiva por la “la falta de información y capacitación, de repente hay que hacer entender a la población de que este tema se tiene que manejar técnicamente”.
Las agresiones sufridas por los 102 profesionales de la salud se produjeron a raíz de la aparición de los primeros dos casos de COVID-19 en esa región del departamento de La Paz. Condori recordó que el personal de la salud es el que está en guerra contra el coronavirus, por lo que espera que la población tome en cuenta esta situación y les permitan trabajar, de lo contrario se volverán a replegar, manifestó a tiempo de agradecer por las atenciones recibidas en el centro.