Celebración y compromiso en la entrega de la Superobra de canalización del Río Tangani

59
Entre promesas y desafíos, el Alcalde no solo presentó la Superobra como un triunfo, sino también como un grito de unión frente a la adversidad. Foto:AMUN

El proyecto, concebido como un control hidráulico en la cuenca del río Tangani, busca reducir la velocidad del caudal del río, que presenta pendientes abruptas (35-40%) y suelos erosionables.

AMUN / 19-10-24

En medio de una gran fiesta, un centenar de habitantes del Macrodistrito Periférica se congregó para celebrar la entrega de la Superobra: la canalización del río Tangani, un proyecto de infraestructura que aspira a devolver la seguridad y estabilidad a una comunidad que ha sufrido las consecuencias de la erosión y el desbordamiento del afluente.

Acompañado por el grupo de batucada, los Black Power y más de medio centenar de vecinos, el alcalde Iván Arias inició su recorrido a pie por los 2.17 kilómetros de la obra, marcados por un esfuerzo colectivo que promete transformar no solo el paisaje, sino también la vida de quienes allí habitan.

La ceremonia oficial se llevó a cabo al llegar al emblemático Plan Autopista, donde el ambiente festivo se intensificó con la interpretación del himno a La Paz, resonando en los corazones de todos los presentes.

El proyecto, concebido como un control hidráulico en la cuenca del río Tangani, busca reducir la velocidad del caudal del río, que presenta pendientes abruptas (35-40%) y suelos erosionables.

La obra —cuyo costó fue de 9.713.762,62 bolivianos —  interviene en 44 puntos a lo largo de 2.17 km, construyendo muros vertederos, colchones hidráulicos, desarenadores, alcantarillas y bóvedas de hormigón, reforzando así la estabilidad del río, y con ello, la seguridad de las infraestructuras y la vida comunitaria. Las caras sonrientes de los vecinos brillaban con esperanza, una reflexión tangible de su anhelo por un futuro más seguro.

Con la bandera de La Paz en mano, el Alcalde se dejó llevar por el ambiente festivo, haciendo flamear la bicolor paceña. Más allá de las celebraciones, su discurso reverberó con un mensaje claro y contundente.

Recordó los estragos de la naturaleza, momentos de impotencia y las oraciones compartidas entre vecinos que clamaban por ayuda y sabiduría. Su voz, cargada de emoción, alertó sobre la amenaza constante de la depredación: «El enemigo duerme con nosotros», advirtió, refiriéndose a los loteadores, a pesar de la obra, continúan deforestando y poniendo en peligro el futuro del río.

Entre promesas y desafíos, el Alcalde no solo presentó la Superobra como un triunfo, sino también como un grito de unión frente a la adversidad. «Ninguna obra podrá resistir la depredación», afirmó, instando a los presentes a mantenerse vigilantes y a apoyar la defensa del medio ambiente.

Reconoció las dificultades enfrentadas para avanzar en otros proyectos, denunciando la ceguera de ciertos políticos que priorizan sus intereses antes que los de la gente. La entrega de la Superobra fue más que una inauguración; representó un compromiso renovado por parte de la autoridad con su comunidad.

Entre promesas de un futuro brillante, incluido el “año de la luz LED” que traerá nuevas luminarias a las calles del barrio, el burgomaestre concluyó su discurso con un llamado a la unión y la esperanza. En un gesto que evocó los comienzos difíciles, convocó a las mujeres de la comunidad a unirse en oración, recordando que la fe y la unión son el verdadero motor del cambio.

///

Deja un comentario