Las horas previas habían estado marcadas por la tensión y la expectativa. En los hospitales La Portada y Cotahuma, dos mujeres se encontraban en trabajo de parto y la pregunta que todos se hacían era: ¿quién sería la primera en dar a luz?.
AMUN/ 22/01/25
La emoción se palpaba en el aire, un día que sería recordado no solo por el nacimiento de un nuevo ser, sino también por la celebración del Bicentenario de Bolivia. “¡Viva Mi Patria Bolivia!”, resonó en los pasillos del Hospital Municipal de Cotahuma mientras la banda Eduardo Caba llenaba el espacio de melodías vibrantes.
La sala de partos se abrió y apareció Jheny Chura Roque, cargando con orgullo a su bebé, el número 200 que nacía en el año de la celebración. “¡Bienvenido bebé Bicentenario!”, gritó el personal del hospital y de la Secretaría Municipal de Salud y Deportes, que habían llegado con globos y regalos para festejar la ocasión.
Las horas previas habían estado marcadas por la tensión y la expectativa. En los hospitales La Portada y Cotahuma, dos mujeres se encontraban en trabajo de parto y la pregunta que todos se hacían era: ¿quién sería la primera en dar a luz? La competencia amistosa se sentía en el ambiente y el más nervioso de todos era Juan Daniel Cáceres Zárate, el padre.
“Es una sorpresa para mí ver a la gente con globos y a la banda. Nadie esperaba una celebración así, ¿no? Pero estoy feliz”, confesó mientras el nudo en su pecho se mezclaba con la alegría del momento. Su segundo hijo había llegado después de mucho anhelo y aunque había habido momentos de incertidumbre, el pequeño llegó sano y fuerte, algo que el padre consideraba un gran regalo.
Padres son de Oruro
El subalcalde de Cotahuma, Gonzalo Gonzales, se unió a la celebración, señalando que el nacimiento del bebé era una hermosa forma de conmemorar los 200 años de independencia de Bolivia. “Me gustaría que el bebé lleve el nombre de uno de los libertadores, aunque lo dejo a decisión de los padres”, comentó.
Los padres, oriundos de Oruro, habían llegado a La Paz para realizar trámites y se encontraron en la inesperada situación de acudir al hospital de Cotahuma para dar la bienvenida a su hijo. “Estamos contentos y alegres, el bebé 200 del Bicentenario nació aquí”, dijo la secretaria Municipal de Salud y Deportes, Fátima Verduguez, destacando la importancia de este momento para la patria y la esperanza que simboliza.
Al llegar el momento del parto, el director del hospital, Alfredo Salinas, no pudo ocultar su emoción. “Nos sentimos orgullosos de que el bebé número 200 haya nacido aquí a las 13:42, por parto natural. Es un varoncito que ha llegado con mucha suerte y alegría”, expresó.
La alegría no solo era palpable entre los padres y el personal del hospital, sino que se extendía a todos los presentes. La banda continuó tocando las canciones tradicionales de los clubes paceños Bolívar y The Strongest, creando un ambiente festivo, mientras se preparaban los regalos y sorpresas para la familia. “Todo salió bien, el bebé nació sano y con buen peso, de 3,700 Kilogramos”, dijo el médico.
La jornada culminó con alegría y esperanza, recordando a todos que en cada nacimiento hay una historia de amor, lucha y sentimientos profundos. La llegada del bebé fue celebrada no solo por su familia, sino también por muchos otros ciudadanos, que dan la bienvenida a un futuro lleno de posibilidades.
Padrino
El alcalde Iván Arias, con una sonrisa que irradiaba optimismo, visitó las instalaciones del nosocomio en un día especial: el nacimiento del bebé número 200 de los cinco hospitales municipales. Lo que podría haber sido un evento cotidiano se transformó en una fiesta, donde la vida y la comunidad se entrelazaron. Vicente es el nombre del recién nacido y su padrino de bautismo será el Alcalde.
Desde enero, el alcalde y su equipo habían estado llevando a cabo un conteo riguroso de los nacimientos en los hospitales de la ciudad, una iniciativa que tenía como objetivo resaltar la importancia de la atención materno-infantil.
Arias, en su visita, no solo felicitó a los emocionados progenitores, sino que también asumió con orgullo el papel de padrino de bautismo del recién nacido. “Este es un regalo para la Patria”, declaró con fervor, enfatizando la relevancia de cada nuevo ser que llega a este mundo. Sus palabras resonaron en el ambiente, llenando el espacio con un sentido de propósito y esperanza para el futuro.
El alcalde, además, se comprometió a garantizar la atención gratuita de los primeros controles de salud tanto para la madre como para el niño, un gesto que demuestra el compromiso de la municipalidad con el bienestar de sus ciudadanos más vulnerables. “Cada vida cuenta, y como administración, somos responsables de brindar el apoyo necesario para que cada madre y cada hijo tengan las mejores condiciones para comenzar su camino”, añadió.
La escena en el hospital era conmovedora: familiares y amigos celebraban, abrazaban y compartían sonrisas en un ambiente de camaradería. El aroma de la vida nueva llenaba el aire, y la alegría se reflejaba en los rostros de todos los presentes. La visita del alcalde no solo simbolizaba un reconocimiento a la labor del personal de salud, sino también un llamado a la comunidad para seguir apoyando a las familias y a los más pequeños.
En un mundo donde a menudo se pasa por alto la importancia de la atención a la salud y el bienestar de los recién nacidos, esta jornada en el Hospital Municipal Cotahuma se erige como un recordatorio de que cada vida es un motivo de celebración. Con la llegada del bebé número 200, el alcalde Iván Arias y los progenitores no solo celebraron un nuevo comienzo, sino que también reafirmaron su compromiso con un futuro más saludable y esperanzador para todos.
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