AMN/05-06-21
El control de este sábado fue en Villa San Antonio y Chasquipampa, donde el alcalde Iván Arias destacó el cumplimiento a las restricciones en locales y negocios de ambas zonas que estaban cerrados y no permitían consumo de bebidas alcohólicas, y anunció que esta serie de operativos seguirá hasta el lunes en el marco de las restricciones para contener la tercera ola de la Covid-19.
«Quiero estar agradecido a la población, por lo menos los locales de salones de eventos todos están cerrados acatando la disposición», afirmó el alcalde durante la requisa en la zona Sur.
Arias lamentó que un grupo de jóvenes fue sorprendido en la plaza Humboldt en estado de ebriedad e instó a padres de familia a evitar este comportamiento en sus hijos.
A las 19:00, el burgomaestre de La Paz lideró el grupo de control que estaba integrado por policías, guardias municipales y funcionarios de la Intendencia Municipal.
En el recorrido, Arias dijo que vio algunas personas que instalaron mesas de ofrenda a la Pachamama, les pidió que no se aglomeren, pero la situación en algunos café Internet era distinto ya que al interior había decenas de jóvenes.
Explicó que algunos vecinos exigieron mayor control a las licorerías puesto que atienden por encima del horario permitido, que es hasta las 22:00.
La prohibición de fiestas y eventos sociales, con o sin bebidas alcohólicas, fue determinado por el Comité de Operaciones de Emergencia Departamental (COED) y será el lunes a las 15:00 que se volverán a reunir sus integrantes para analizar la estadística sanitaria del departamento y así poder asumir otras disposiciones para esta tercera ola del coronavirus, dijo el alcalde de La Paz.
El secretario municipal de Desarrollo Económico, Marco Agramont coincidió con el alcalde Arias y también ponderó la actitud de propietarios de locales en Chasquipampa que no atendieron para consumo de licor en sus instalaciones.
Recordó que el viernes intervinieron 10 locales en el Centro, Sopocachi y Miraflores donde sí había personas que consumían bebidas alcohólicas y en un caso los funcionarios ediles suspendieron el negocio, en tanto el resto decidió cerrar de manera voluntaria.