El fin es lograr que los contribuyentes que han vendido su vehículo a otra persona dejen de pagar los tributos.
AMUN/15-11-24
Hace una semana, en las oficinas de la Administración Tributaria Municipal (ATM), un ciudadano se quejó al alcalde Iván Arias porque debe pagar una deuda de una moto Jawa que vendió hace 30 años. ¿Qué pasó en este caso? El comprador nunca pagó el impuesto para automotores y, como no se hizo el cambio del registro del bien, el vendedor acumuló esta mora tributaria.
Este es uno de cientos de casos que se reproducen día a día en la ATM, a donde acude la población para quejarse por las deudas acumuladas. En aras de revertir este panorama y no “castigar” a la persona que vendió una casa o vehículo, la entidad edil ofrece una salida.
“Ante estos reclamos, lo que estamos haciendo es, a través de un trabajo de inteligencia por un área que tenemos específica, identificar en manos de quién está ese vehículo y a ese poseedor le vamos a aplicar todas las medidas, incluyendo el congelamiento de cuentas, la anotación preventiva, la hipoteca legal, no del vehículo, sino de sus propiedades, de sus bienes, porque así lo determina el Código Tributario”, explicó la directora de la ATM, Noemí Lastra, quien destacó que estas son medidas coactivas destinadas a que el deudor pague sus impuestos.
Según esta norma, el patrimonio de un deudor de impuestos sirve como garantía para que se haga efectivo el pago del mismo. Para el alcalde Iván Arias, esta falta de regularización de aquellas personas que han comprado un vehículo y no pagan impuestos, con esta medida deberán “poner sus barbas en remojo”, dado que con el tiempo ya no podrá eludir sus responsabilidades tributarias.
////
