AMUN / 8-04-23
La Alcaldía de La Paz denunció este sábado que el local de venta de alimentos Kalakitas, ubicado en el barrio San Miguel en la zona Sur, fue suspendido la tarde del jueves porque en su interior se encontraron heces de ratón, productos alimenticios en mal estado, herramientas de cocina oxidadas, y en horas de la noche fue desprecintado, y, por ello, no descartó clausura definitiva porque sus propietarios cometieron múltiples infracciones. La Intendencia volvió a precintar el lugar.
“Quiero ser enfático en este tema y denunciar que están pretendiendo desvirtuar el trabajo realizado por el municipio, ¿en qué sentido?, cuando hemos iniciado la intervención a Kalakita hemos encontrado falta de higiene, hemos encontrado heces de ratón, hemos encontrado contaminación cruzada, que los alimentos estaban mal manipulados y mal conservados, productos en mal estado, ya en descomposición, utensilios totalmente oxidados, ensarrados, que estaban utilizándolos para cocinar los alimentos”, denunció el intendente municipal Raúl Salta, en conferencia de prensa.
Kalakita es el nombre del local de venta de comida mexicana que fue suspendido por la Intendencia Municipal tras un operativo realizado el pasado jueves, donde se encontró alimentos en mal estado, heces de ratón, malas condiciones de higiene, utensilios oxidados, entre otras faltas que derivaron en la acción municipal.
Salta denunció que los responsables de esta actividad económica desprecintaron el local el mismo jueves por la noche, situación que podría derivar en un proceso de cierre definitivo por incumplimiento de la sanción. Tras el desprecintado del jueves por la noche, la Intendencia volvió a precintar el local para que conste que está suspendido.
La autoridad edil fue enfática en señalar que lo publicado por los responsables de este establecimiento en redes sociales de que hubo un presunto abuso municipal no responde a la verdad, dado que las condiciones de higiene del local ponían en riesgo la salud de los comensales dado que se encontraron heces de ratón “en diferentes puntos” del ambiente.
La intervención fue ejecutada a raíz de una denuncia de los vecinos de la zona de San Miguel, quienes se contactaron con la Intendencia para mostrar su preocupación, no solo por el estado de mala higiene del local, sino por el maltrato animal que sufre el perro que custodia este comercio.
“Hemos atendido esta denuncia realizada por vecinos de la zona porque denunciaron no solo la falta de higiene, sino maltrato a los animales. Y ahora sale un video en Facebook señalando que es peet friend (pequeño amigo), cuando es todo lo contrario, ese pobre perro que está en la puerta, se lo tiene viviendo en malas condiciones”, explicó Salta.
Para la autoridad municipal, lo hecho por los responsables de Kalakitas se constituye en “un riesgo para la salud” e incluso “puede convertirse en un delito”, por lo que se hará un seguimiento a este local para que cumpla con su suspensión provisional por tres días.
“El Gobierno Municipal va a iniciar las acciones correspondientes, lo que ha hecho por procedimiento es realizar una suspensión, la actividad está suspendida por tres días, pero hemos verificado el mismo jueves en la noche que ya estaba desprecintada, lo que no se puede hacer”, dijo el intendente Salta.
Conforme establece el procedimiento en estos casos, funcionarios de la Subintendencia Sur y Zoonosis se apersonaron a la Av. Montenegro de la zona San Miguel, según cronograma de operativos establecido para el jueves 6 de abril e ingresaron a la actividad económica Kalakitas, en cumplimiento a la hoja de ruta No 13603.
Dejaron un acta de decomiso, una citación para que el propietario se apersone el lunes 10 de abril ante la Subintendencia Sur para presentar sus descargos. La actividad económica fue suspendida por tres días por las infracciones sanitarias encontradas y se le colocó un precinto a su puerta, como dispone la Resolución Ejecutiva No 15/2012, Protocolo de Actuación.
Sin embargo, por la noche el local fue encontrado sin el precinto correspondiente, por lo que se iniciará un proceso administrativo sancionatorio por falta muy grave: incumplimiento de cierre preventivo, mismo que tiene entre sus sanciones la clausura definitiva de la actividad económica.
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