La Paz/AMN.- «No me pega siempre», «él dice que soy inútil, cada vez me insulta», son algunos testimonios expresados cuando se naturaliza la violencia. Los golpes y actos de crueldad son señales de convivencia con un posible feminicida, según el estudio: «Predicción de Riesgo de Feminicidio», realizado por el Observatorio Municipal de Seguridad Ciudadana.
Cualquier acto no accidental que produzca daño, como: empujar, pegar, quemar, lanzar objetos, mutilaciones, obligar a ingerir productos químicos desconocidos, golpes con objetos contundentes, tener antecedentes de hospitalizaciones por gravedad de daño físico o agresiones en estado de gestación o embarazada en los últimos seis meses, son indicios de la existencia de violencia física susceptible de causar lesiones. Es el cuarto indicador de riesgo identificado en la investigación de la Alcaldía de La Paz.
“Discutimos y al forcejear me dio un puñete en la cara, perdí dos dientes y fui a una clínica porque el dolor era insoportable y la sangre no dejaba de salir. En mi trabajo y a mi familia les dije que tuve un accidente en la calle”, recordó Alejandra (nombre ficticio), quien convivió con su pareja seis años. Después de ese incidente se alejó de su exnovio, pero una semana después regresó con él.
Los indicadores del estudio fueron identificados con base en la revisión de archivos de las Plataformas de Atención Integral a la Familia (PAIF) del municipio paceño y otros planteados por los investigadores que hicieron entrevistas a reos del penal de San Pedro que tienen sentencia ejecutoriada de 30 años sin derecho a indulto por feminicidio íntimo; también consultaron a jueces.
“Nunca estaba bien lo que hacía, se enojaba si no hacía las cosas como él quería… Una vez me dio una cachetada en público solo porque lo contradije y al día siguiente no se disculpó, era muy orgulloso”, agregó la mujer que dio su testimonio y es madre de un niño que tuvo con su exesposo, quien también la golpeaba, motivo por el cual se divorció.
El indicador de riesgo décimo sexto es la conducta frecuente de crueldad, de desprecio a la víctima y de falta de arrepentimiento, de acuerdo al estudio. “Llevan a la víctima a sentirse sometida”, señala parte del documento de 94 páginas que fue trabajado desde 2019 y presentado este mes.
Las otras 18 señales de convivencia con un posible feminicida están detalladas aquí:
Al respecto, el coordinador del Observatorio Municipal de Seguridad Ciudadana, Hermógenes Carrillo, dijo que este estudio permite una intervención en caso de violencia extrema y prevenir el feminicidio. “Hemos hecho un análisis desde la postura del feminicida”, afirmó el servidor público.
“Nunca pude denunciarlo, pensé que cambiaría, era muy bueno con mi hijo y no quería quitarle un padre, porque con mi niño era amoroso, responsable y atento; pero, cada vez la violencia psicológica era peor, solo lloraba, hasta que un día me ahorcó hasta casi hacerme desmayar, me soltó porque vio que me desvanecí”, relató Natalia, quien al final, abandonó a su agresor. Hasta la primera semana de abril de 2021 se registraron 32 feminicidios en Bolivia.