Se realizó un operativo conjunto entre la ATT, la Alcaldía y otras autoridades para verificar el origen de los productos
AMUN/12-12-2024
La Terminal de Buses de La Paz fue escenario de una importante incautación de productos presuntamente ilegales este jueves, cuando entre personal municipal y nacional, llevaron a cabo un operativo conjunto tras recibir una denuncia relacionada con el transporte de botellas de aceite sin registro sanitario.
Las autoridades confirmaron que alrededor de 300 botellas, de 5 litros y 900 mililitros, fueron halladas dentro de un bus que se encontraba en la terminal, con origen en la ciudad de Villazón. La directora de la Terminal de Buses de La Paz, Iveliz Asturizaga, comentó que la denuncia fue inmediatamente canalizada hacia la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT).
“La ATT ha tomado las cartas en el asunto, ha convocado al Viceministerio de Defensa al Consumidor y nosotros, como Gobierno Municipal de La Paz, hemos convocado también a la Intendencia, a la Unidad de Defensa de Derechos de los Consumidores y a las entidades encargadas», explicó Asturizaga. “En este momento hay un contingente de más de 60 personas verificando el origen del aceite y su falta de registro sanitario«, dijo durante el programa “El negro en la calle”.
El hallazgo ocurrió alrededor del mediodía, cuando personal de la terminal detectó la mercancía irregular. El aceite, presuntamente de origen argentino, estaría siendo transportado sin los permisos correspondientes. En medio de la incautación, algunos transeúntes intentaron apoderarse de las botellas, lo que generó un incidente controlado por los efectivos policiales mediante el uso de gasificación.
“Todas las botellas fueron enumeradas y los dueños tienen 7 días para reclamar. Si presentan documentación que respalde la legalidad del producto, se les devolverá. Las botellas no tienen registro de SENASAG, pero si ellos presentan todo el respaldo, vamos a devolverles», indicó la secretaria Municipal de Desarrollo Económico, Sandra Soliz, durante el decomiso.
