Con un camión largo y el apoyo de tres volquetas, el traslado de los materiales para levantar el árbol navideño fue posible gracias a un eficiente trabajo en equipo.
AMUN / 17-11-24
Mientras la oscuridad se apodera de la plaza Tejada Sorzano, un grupo de trabajadores se afanaban, la noche del sábado 16 de noviembre, con precisión y dedicación por levantar un monumental árbol de más de 35 metros. El secretario municipal de Infraestructura, Boris Bacarreza, se encuentra en primera línea, supervisando las labores y brindando detalles sobre la complicada operación.
«Para poder levantar el árbol de Navidad que va a tener algo más de 35 metros, necesitamos un poste», afirmó Bacarreza, quien se movía entre las herramientas y materiales dispuestos para la labor. «Este poste lo hemos trasladado en tres piezas. Cada una tiene entre 11 y 12 metros. Además, estamos utilizando estructuras de hormigón macizo para garantizar la estabilidad. Ya trasladamos tanto las bases como las bancas de hormigón, que en total suman unas 15 toneladas», explicó, mientras observaba cómo el equipo se movía con sincronía.
La lluvia intermitente no limitó al ímpetu del equipo de trabajo, que comenzó su jornada a las 8 de la noche y concluyó en las primeras horas de la mañana de éste domingo. «Sí, la lluvia ha sido un inconveniente», reconoció el secretario, «pero aquí estamos, bajo la lluvia, trabajando para que todo esté listo a tiempo».
Con un camión largo y el apoyo de tres volquetas, el traslado de los materiales ha sido posible gracias a un eficiente trabajo en equipo. «La logística ha estado a cargo de los Gueris, junto al jefe de la unidad de talleres, quienes coordinaron cada movimiento para que el trabajo fluya sin contratiempos», agregó Bacarreza, mientras se detuvo un momento a contemplar el avance en la construcción del árbol.
Pronto, la estructura comenzará a destacar en la plaza, mientras los vecinos de Miraflores, como el resto de los paceños aguardan ansiosos su encendido oficial. La magia de la Navidad se siente en cada rincón, y aunque el clima no fue del todo favorable, el espíritu de trabajo colectivo y la expectativa de una celebración inolvidable hicieron del levantamiento del árbol un evento que ya se asoma a la historia local.
Así, bajo la tenue luz de los focos y el murmullo de la lluvia, el árbol de Navidad empieza a tomar forma, preparando a la plaza Tejada Sorzano para iluminar las noches de diciembre y dar la bienvenida a la temporada festiva.
////
