La Selección Nacional jugó condicionada 70 minutos, a partir de la expulsión de Héctor Cuéllar
AMUN/10-10-20224
Bolivia sepultó el invicto colombiano en el Titán de Villa Ingenio. En un partido heroico, con 10 jugadores en campo tras la expulsión de Cuéllar, los guerreros de Oscar Villegas sacaron un triunfo ante uno de los más pintados del continente.
Bolivia fue un aluvión los primeros 20 minutos, fue intenso, apeló a los remates de larga distancia con jugadores como Robson y Chura. Ramiro Vaca en lo suyo, gestando fútbol, cobrando los tiros de esquina y buscando espacios para rematar.
La idea era clara, ahogar al rival, hacer sentir la localía y tratar de abrir la ruta del gol lo antes posible. Sin embargo, una jugada apresurada de Marcelo Suárez en el minuto 20 derivó en la expulsión de Héctor Cuéllar. En su intento de hacer rematar al arco desde 45 metros la jugada le salió mal y se vino el contragolpe colombiano. Tuvo que actuar Cuéllar in extremis y cometer falta, lo que derivó en su expulsión.
Dos minutos después, Jeyson Chura se lesionó y tuvo que dejar el campo. Gabriel Villamil ingresó al campo, no sólo por la lesión del atigrado, sino para cubrir el hueco dejado por Cuéllar.
A partir de ese momento, Colombia tomó control del juego, Bolivia se replegó al quedar con 10 hombres y el cuadro cafetalero comenzó a hilvanar jugadas de ataque de la mano de James Rodríguez y Luis Díaz, quien pudo abrir el marcador para el visitante en el minuto 44, pero el Billy Viscarra estuvo atento para despejar el tiro del jugador del Liverpol.
Así terminó el primer tiempo, con una Bolivia que hizo el gasto en los primeros minutos y tras la expulsión midió fuerzas. Pese a eso llegó un par de veces más con peligro sobre la portería de Camilo Vargas, quien hasta ese momento se constituía en la figura del partido.
Colombia, en determinado momento, tocó hasta 15 y 20 veces el balón sin oposición, administrando energías. No en vano las estadísticas del juego le dieron el 63% de posesión contra el 37% de Bolivia en todo el lance.
La segunda etapa empezó con una Colombia agresiva, dispuesta a buscar el gol y aprovechar la ventaja numérica. Y en medio de esos arrebatos ofensivos del rival, Bolivia tuvo una opción previa al gol de Miguel Terceros de la mano de Carmelo Algarañaz cuyo remate fue contenido por Camilo Vargas
Casi a renglón seguido llegó el gol, gracias a un saque lateral que ejecutó rápidamente Robson Matheus, quien entregó el balón a Tercero. Miguel mostró su chapa de crack, eludió a dos rivales y sacó un remate que se coló en el ángulo de Camilo Vargas, nada qué hacer para el portero colombiano.
Tras el gol, una vez más Bolivia replegó líneas y cedió la iniciativa al rival, pero Colombia no encontró la forma de abrir el candado defensivo de la Verde.
Villegas oxigenó el equipo con los cambios de Luis Paz, Bruno Miranda y Adalid Terrazas por Terceros, Robson y Algarañaz. Por su parte, Néstor Lorenzo metió toda la carne al asador con los ingresos de Jhon Córdoba, Cucho Hernández y Jefferson Lerma.
El partido se prolongó hasta el minuto 97, con una Colombia infructuosa y una Bolivia defendiendo el resultado con el puño cerrado, con unos 10 guerreros que dieron la talla, poniendo el alma en cada jugada, con hambre de gloria y dando de qué hablar. Después de 21 años, Bolivia le ganó a Colombia y hace soñar a todo un país.
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